-El analista político, Olban Valladares, enumeró hoy una serie de retos que debe cumplir la nueva presidenta de Honduras, Xiomara Castro, en su nuevo mandato de gobierno de cara al periodo 2022-2026.
Los mismos que van desde la generación de confianza en la población, recuperar la economía, evitar la migración, generar oportunidades de empleo y mejorar la seguridad pública para que Honduras despegue hacia mejores niveles de desarrollo.
Valladares adelantó que el panorama no es fácil ya que se necesita un gobierno que transite por una senda eminentemente democrática, donde se respeten los derechos humanos, existan metas claras, definidas y propósitos alcanzables.
Una de sus recomendaciones es que se debe salir de las políticas de los subsidios que caracterizaron los últimos gobiernos.
Indicó que la Presidenta hondureña enfrenta retos muy serios y si se quiere, tener una gestión satisfactoria en los próximos cuatro años.
La palabra mágica para su gobierno va ser la generación de confianza, porque, en realidad, la mitad de los electores no apoyaron con su voto a doña Xiomara para llegar a ser Presidenta de la República.
No la apoyaron, pero, de alguna forma, tienen algún grado de esperanza de que en este gobierno no se van a cometer los actos de corrupción extrema de las últimas administraciones, de una entrega si se quiere traicionera de los bienes y de los intereses del país en las famosas Zonas de Empleo y Desarrollo (ZEDE) que ha ocasionado mucha controversia en Honduras.
Recordó que el nuevo gobierno prometió derogar esas leyes y reformar los artículos de la Constitución que fueron trastocados para impulsar un modelo que fue, desde un principio, tergiversado, distorsionado, y que terminó siendo, particularmente, una entrega de la soberanía territorial, jurídica y social del país.
Reiteró que el primer reto que tiene la Presidenta hondureña es generar confianza y convencer a esa mitad del electorado hondureño de que su gobierno no va a ser de extrema a pesar de que se le ha calificado y bautizado como un gobierno de izquierda.
Expresó que el Partido Libertad y Refundación (LIBRE) es un abanico de exposiciones, no tanto ideológicas porque en países como Honduras, esa idea de las izquierdas no es la misma que priva en países como Venezuela, Cuba y la misma Nicaragua.
Agregó que en el pueblo hondureño está más arraigado el concepto democrático y no hay forma que se pueda permear ese arraigo y esa afición de vivir en democracia, donde se respete el sentido de propiedad privada, que es una amenaza siempre, cuando sobrevienen gobiernos de corte tradicionalmente denominados de izquierda.
Otro de los retos que enfrenta la Presidenta Xiomara Castro es recuperar integralmente al país en materia económica.
Comparó que, en el 2020, la economía del país cayó entre un 9 y un 10% que contrasta con el crecimiento entre el 5 y el 6% que se tuvo en el 2021, lo cual no es suficiente para compensar la caída económica sufrida por el país.
Otro de los retos que merecen atención inmediata del nuevo gobierno es la migración, ya que los Estados Unidos está reprochando y demandando mayor colaboración de los países del Triángulo Norte de Centroamérica para que no permitan ellos, aquí mismo, que miles de ciudadanos migren a pie hacia el Norte.
Según Valladares, la única forma de poder lograrlo es con la generación de oportunidades de empleo, y mejorando los niveles de seguridad pública en el país.
Señaló que, en los últimos años, se ha recrudecido la violencia, pese a los esfuerzos que se han hecho por fortalecer los cuerpos de seguridad incorporando ciertas tropas élites del ejército a una policía militar de orden público.
Indicó que, en los últimos meses del año 2021 y lo que va del 2022 tenemos una cantidad de violencia generalizada que amenaza con destruir lo poco que se había logrado en materia de seguridad.
Otro gran reto, mencionados por el analista, es el sostenimiento de la moneda que poco a poco se ha venido deslizando en el país.
Añadió que en una economía tan pequeña como la hondureña eso tiene implicaciones en los costos de los productos importados muy altos, particularmente en lo que se refiere a las medicinas y combustibles.
“El panorama no es fácil, lo que se necesita es un gobierno que transite por una senda eminentemente democrática, que se respeten los derechos humanos, que existan metas claras, muy bien definidas y propósitos alcanzables”, concluyó.
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