Radio América. A criterio del dirigente magisterial Onán Calix, leer la biblia en los centros educativos es una cortina de humo, en vista de los últimos ataques que ha recibido la clase “política corrupta” de los altos jerarcas de las iglesias.
Para Cálix, esta propuesta es para contentar la iglesia ya sea Católica o Evangélica.
“Se ha propuesto que se lea la biblia, pero primero hay que sacar los demonios que hay en el Congreso Nacional”, señaló el educando.
El dirigente nacionalista pide el artículo 151 de la Constitución de la República, donde establece que la educación es laica.
“La iglesia es para rezar, leer la biblia y hablar de Dios; la escuela es para educar en temas nacionales y la casa es el principal centro de estudio de la biblia y la escuela”, manifestó el entrevistado en desacuerdo a la propuesta que nace desde el Congreso hondureño.
Representantes del Congreso Nacional, Secretaría de Educación, Iglesia católica y Confraternidad evangélica de Honduras tuvieron las primeras reuniones de cara a los mecanismos de implementación de la lectura de la Biblia en el sistema educativo público primario nacional.
El objetivo de la mesa de trabajo, como conclusión de las autoridades, no es promover una religión, pero sí los valores, ética y buenas costumbres en la niñez hondureña.
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