Radio América – El analista político Olban Valladares dijo este martes que en la país en lugar de mejorar las condiciones políticas y sociales «corrimos de una manera vergonzosa y casi como pecado capital al único instrumento que nos tenía con esperanzas de que los corruptos iban a ir presos», en referencia a la salida de la MACCIH.
Señala Valladares que en Honduras «triunfo la impunidad y la corrupción » luego que el Gobierno determinara no renovar el convenio de la Misión Anticorrupción que venció el 19 de enero pasado, al no llegar a ningún acuerdo con la Organización de Estados Americanos (OEA).
Es por corrupción que la MACCIH queda fuera del territorio nacional, al igual que pasó en Guatemala con la CICIG, dijo.
Los que ha pasado en el país «es una vergüenza, ya se volvieron cínicos, la corrupción no cabalga en el potro del cinismo, ya no importa lo que el pueblo diga», porque hubo manifestaciones de organizaciones exigiendo al Gobierno que renovara el acuerdo de la MACCIH «sin embargo se hicieron oídos sordos y de una manera olímpica se deshicieron de ese instrumento que era toda la esperanza del pueblo hodnureño», manifestó el exdiputado.
¿Dónde estamos, qué pretende este Gobierno, mantener la paz, la tranquilidad y la armonía o sencillamente crear más situaciones de pena y confrontación?, se preguntó Olban Valladares.
Para el analista en Honduras no hay una verdadera oposición, solo algunos opositores, y donde los líderes de partidos que están tan anacrónicos como los que ellos critican a los demás de partidos cavernarios «no se ponen de acuerdo y rompieron un diálogo que también era otra esperanza del pueblo para que tuviéramos entendimiento», y ahora reclaman un paro nacional el cual solo se hace si todo el mundo está de acuerdo, pero «están más sumergidos en el tema político».
Los hondureños nunca se han podido poner de acuerdo para buscar y encontrar el camino hacia el desarrollo humano del pueblo, y entre más se camina por sendas tortuosas más se acentúa la pobreza, el analfabetismo, el atraso y otras características que hacen ver el futuro del país con mucho pesimismo, agregó.
Lo importante ahora es cambiar de dirigencias políticas porque algunas figuras «ya están probados», y sin embargo aún siendo señaladas por acciones irregulares están proponiéndose para alcanzar la primera magistratura del país.
«Eso ya es el colmo, cuando ni siquiera ellos pueden admitir que tienen pecados capitales enormes y quieren que el pueblo hondureño los siga apoyando», cuestiona.
Olban Valladares insta a la juventud hondureña a incorporarse y crear nuevas corrientes de pensamiento, estar conscientes de que en el país si no se erradica la corrupción, jamás se podrá alcanzar a los países de Centroamérica.
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