Radio América. La Asociación de Funerarias denunció este miércoles el irrespeto en Honduras al sistema de manejos de cadáveres durante la pandemia y los velorios masivos en las comunidades del interior del país pese a la Covid.
“Los velorios últimamente se están haciendo de manera masiva en los pueblos del país”, expresó el dirigente Edwin Lanza, en el marco de una prohibición gubernamental para los actos de exequias.
Lanza dice que la idiosincrasia del pueblo hondureño y el sentimiento de acompañamiento conduce a ese tipo de prácticas, las cuales se encuentran censuradas desde el pasado 3 de abril debido al brote de coronavirus.
“Debemos guardar el distanciamiento y recordar que no se es permitido en estos momentos más de 20 o 30 personas en un sepelio, se debe respetar eso”, agregó.
El presidente del sector funerario en ese sentido hizo un llamado a los Comité de Emergencia Municipal (CODEM) y al Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (SINAGER) a ejercer el control.
«El A-B-C en el sistema del manejo de cadáveres es el respeto al protocolo y no se está dando, no se está cumpliendo por parte del Gobierno», cuestionó.
Si duda que el covid mata pregúntele a la Asociación de funerarias 5800 fallecidos. Cuidese el área rural entierros masivos y descontrolados….1400 Cortes. 1300 Francisco Morazan. 250 Olancho. Colon 275 los mayoritarios 245 Atlántida . Una realidad innegable
— Carlos Umaña . firmes y dignos (@drcumana) October 21, 2020
Según los datos Covid de la Secretaría de Salud de Honduras solo en el departamento de Francisco Morazán 654 personas han muerto a causa del covid desde el inicio de la pandemia en marzo y 811 en Cortés.
“La demanda por féretros ha crecido en los departamentos de Olancho, Islas de la Bahía y Copán”, dijo Lanza, señalando que en ningún momento la curva de casos en el país ha sufrido un aplanamiento.
Comentó que los datos del Gobierno no concuerdan con los del sector funerario organizado, pues en sus estadísticas se contabilizan 5,477 fallecidos y en los del SINAGER apenas 2 mil 582.
A raíz de la pandemia del COVID-19, los entierros de fallecidos en Honduras desde mediados de marzo venían siendo rápidos y sin tiempo para velatorios.
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