Radio América. Más de dos millones de lempiras han sido destinados para tratamiento de personas quemadas por la manipulación de pólvora, de las que son atendidas por la Fundación para el Niño Quemado (FUNDANIQUEM), declaró este miércoles su director Omar Mejía.
Ante esa inversión de recursos, el representante de la institución lamentó la irresponsabilidad en el abuso de la pólvora, así como el descuido de los padres de familias con sus hijos debido al potencial enorme de los explosivos que mutilan manos y piernas de los menores de edad.
Ante esas graves consecuencias donde una considerable cantidad de personas sobre todo niños han resultado afectados en las fiestas navideñas y de fin de año por quema de pólvora, el director de FUNDANIQUEM pidió una regulación importante del potencial de los cohetes o artefactos explosivos.
Asimismo, demandó a las alcaldías municipales que permiten la comercialización de la pólvora desde un principio promover campañas de prevención sobre el uso de tales materiales en sus jurisdicciones.
Pese a que ya está estipulado de que el gobierno tiene que ayudar a los hospitales en el caso referido, Mejía instó al Congreso Nacional ordenar un tipo de manejo de la pólvora en el país.
No obstante, el entrevistado apuntó que para evitar esas lesiones en las personas, lo mas importante es una reflexión de parte de las alcaldías o como país, que la quema de pólvora no está dejando mas de 63 niños y adultos mutilados en todo el territorio nacional.
De esa cantidad el 50 por ciento de los menores de edad habrían perdido un miembro de su cuerpo como manos, dedos y genitales quienes han quedado marcado de por vida por la manipulación de la pólvora, concluyó el médico.
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