EFE-Radio América. La India alcanzó este jueves los ocho millones de casos de coronavirus al sumar casi 50.000 nuevas infecciones en las últimas 24 horas, mientras las autoridades advierten de un posible repunte debido a la temporada de festivales.
Los nuevos contagios en este paÃs de unos 1.350 millones de habitantes, aunque muy alejados de su récord mundial de casi 100.000 registrados en septiembre, han aumentado ligeramente respecto a los 36.370 registrados el pasado martes, el número más bajo de infecciones diarias en tres meses.
8 MILLONES Y 120.000 muertes
El segundo paÃs más afectado por la pandemia en términos absolutos ha registrado 49.881 nuevas infecciones por coronavirus en las últimas 24 horas, elevando el número oficial de casos a 8.040.203, según los últimos datos del Ministerio de Salud indio.
Además, el número de fallecidos a causa de la pandemia ascendió a 120.527, tras registrar 517 muertes en las últimas 24 horas.
Según la universidad Johns Hopkins, Estados Unidos sigue liderando el recuento total de infectados con 8,8 millones de casos, seguido de la India y, en tercer lugar, Brasil, con 5,4 millones, aunque el paÃs asiático continúa registrando una tasa de mortalidad más reducida que estos paÃses.
Estados Unidos cuenta 227.673 muertos por coronavirus y Brasil unos 158.000.
LIGERO REPUNTE DE LOS CASOS
La India alcanzó en septiembre cotas récord de nuevos casos, con cifras próximas a la barrera de las 100.000 infecciones, aunque desde entonces los contagios han ido en declive, alcanzando el mÃnimo en tres meses el pasado martes.
Este descenso ha sido destacado por las autoridades indias como esperanzador, aunque los estudios de seroprevalencia llevados en el paÃs alertan de que las cifras reales son muy superiores a las reportadas oficialmente.
«El paÃs ha visto una mejora significativa en los parámetros de la COVID-19, con el número de casos y muertes en una fase de declive. Los casos se han reducido notablemente», afirmó el ministro de Salud, Harsh Vardhan, en una videoconferencia el miércoles.
La tasa de recuperación de la India es la mayor del mundo, dijo Vardhan, mientras que «la tasa de mortalidad también se encuentra a la baja y se sitúa en el 1,5 %».
TEMOR A UNA SEGUNDA OLA
La India celebra entre octubre y noviembre varios festivales hindúes, como el de la diosa Durga y Diwali (también conocido como el año nuevo indio) que dan lugar a populares celebraciones y congregaciones en templos y vecindarios.
Las autoridades han repetido que por el momento no planean confinar de nuevo al paÃs, como ya hicieron el pasado marzo, a diferencia de otros paÃses como Francia o España donde el aumento del número de casos ha provocado la imposición de restricciones.
Pero eso no significa que la época de festivales, y las aglomeraciones que eso conlleva, no inquiete al Gobierno indio.
«La temporada festiva que viene implica un riesgo significativo que podrÃa amenazar los avances hechos contra la COVID-19 hasta ahora. DeberÃamos permanecer vigilantes en los próximos tres meses», alertó Vardhan.
El enfoque de la India consiste por el momento en «hacer llegar hasta el último ciudadano» la obligatoriedad de portar máscaras y mantener una mÃnima distancia social, al tiempo que el paÃs continúa levantando casi todas las restricciones con el objetivo de reactivar la economÃa.
El invierno también acarrea un aumento de los niveles de contaminación, tras varios meses de respiro debido al estricto confinamiento indio, cuyos efectos sobre el sistema respiratorio y la pandemia preocupan igualmente a expertos.
La situación se deja notar especialmente en el norte de la India, donde la calidad del aire en ciudades como Nueva Delhi ha comenzado ya a deteriorarse.
De acuerdo con datos de la principal agencia de monitoreo ambiental de la India, SAFAR, la concentración media de partÃculas PM 2,5 (las más peligrosas para el ser humano) era de 209 por metro cúbico de aire y la concentración de partÃculas PM 10 ronda los 360.
La OMS considera que las concentraciones superiores a 100 partÃculas PM 10 es peligroso para grupos de riesgo y por encima de 300 considera el aire como tóxico para el ser humano. EFE
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