Radio América. El exjefe de las Fuerzas Armadas de Honduras, René Ponce Fonseca, participó este viernes en la investidura de Laura J. Richardson, como nueva jefa del Comando, evento que se desarrolló en Florida, Estados Unidos.
Cabe recordar que durante el juicio del narcotraficante hondureño Geovanny Fuentes Ramírez, fiscales estadounidenses hicieron señalamientos contra el presidente del país y altos personeros de las Fuerzas Armadas.
En el informe, se señaló que un jefe de narcotráfico de Honduras recibió protección para traficar drogas y armas en acciones irregulares en las que involucran a oficiales de las FFAA y al jefe del Ejecutivo.
En ese sentido, la invitación de Ponce Fonseca por la armada estadounidense levantó una serie de preguntas por la población hondureña debido a las acusaciones, mismas que fueron trasladadas al general en Noticiero El Minuto.
“Es una invitación que nos permite recordar y estrechar la mano de estas autoridades que de una u otra forma han sido un bastión importante en el liderazgo regional”, manifestó el exjefe de FFAA.
Ponce en declaraciones a Radio América, dijo que la invitación por el Comando Sur la recibe con “alegría y humildad”, y al mismo tiempo descartan los señalamientos expuestos anteriormente y hace “oídos sordos a palabras necias”.
El entrevistado calificó esas acusaciones como “falacias”, porque afirma que “nosotros somos soldados, construidos en valores morales y seguimos trabajando para ver una Honduras mejor, para seguir fortaleciendo una institución como FFAA”.
Fue consultado si ha sido llamado a declarar ante la justicia de EEUU, respondiendo inmediatamente que “eso no ha ocurrido y no ocurrirá. Seguimos confiando en Dios porque él no deja a sus hijos desamparados”.
A criterio del general en condición de retiro, dichas acusaciones lo han expuesto púbicamente, pero con esta invitación “me están reconociendo públicamente que siguen confiando en las FFAA y en Honduras”.
Finalmente expresó que él no tiene nada que ver en actividades ilícitas, por tanto, sigue trabajando para seguir siendo un soldado leal en la situación de retiro, pero siempre en al servicio de la patria.