Al menos 14 personas murieron soterradas en el occidente de Honduras en cuatro hechos distintos a causa de las torrenciales lluvias que dejó la tormenta tropical Iota, informaron fuentes oficiales.
Ocho de las vÃctimas eran miembros de dos familias que murieron en las aldeas RÃo Negro (tres) y Masincales (cinco), jurisdicción del municipio de San José Manuel de Colohete, departamento de Lempira, en el occidente del paÃs centroamericano.
Otras cinco personas de una misma familia, al parecer tres hombres y dos mujeres, fallecieron en La Fraternidad, departamento de Ocotepeque, mientras que en San Miguelito, Intibucá, ambas comunidades también en el occidente, la vÃctima fue una mujer de 77 años, identificada como MarÃa Juana Reyes.
Honduras ha sufrido en dos semanas severos daños a su infraestructura causados por las tormentas tropicales Iota y Eta, que antes fueron huracanes en categorÃas 5 y 4, en la escala Saffir-Simpson, que entraron por Nicaragua.
El domingo también se informó extraoficialmente de la muerte de una niña en el sector de Brus Laguna, departamento de Gracias a Dios, en el Caribe, limÃtrofe con Nicaragua, por otro derrumbe, de árboles y casas.
Iota habÃa afectado hasta hoy a 357.339 personas en Honduras, donde además se reportan 31 derrumbes en ejes carreteros, indicó el jefe de Operaciones de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), Gonzalo Funes.
Además, unas 10.000 personas han sido evacuadas y 61.228 se encuentran en albergues oficiales, después de que el fenómeno destruyera dos viviendas, afectara a 39 y anegara 7.078.
Iota salió a primeras horas de hoy por el sur de Honduras convertida en depresión tropical, después de haber entrado el martes por el oriente, como tormenta tropical.
Sus bandas han causado lluvias en todo el paÃs, agudizando la grave situación que dejó Eta, que entró por el oriente y salió por el Caribe del paÃs.
Ambos fenómenos dejaron severos destrozos en viviendas, carreteras, puentes, cultivos agrÃcolas y daños a la infraestructura del paÃs, entre otros, con pérdidas que en términos económicos podrÃan superar los 10.000 millones de dólares, según algunos economistas. EFE