Radio América. La no asistencia de funcionarios a la Cumbre de las Américas que se lleva a cabo en Los Ángeles, EEUU, continúa siendo tema de debate en Honduras, pues se cuestiona mucho sobre el impacto que tendría la ausencia de líderes del Triángulo Norte al evento.
En relación a la temática el Designado Presidencial, Salvador Nasralla, es de la opinión que el país podría sufrir cierto “hundimiento” y que la ayuda que ha venido recibiendo podría ser mermada.
“Sabemos que hay diferencias ideológicas y tampoco vamos a estar de acuerdo en todo lo que el gobierno de los Estados Unidos decida, pero es importante que antepongamos la comida de la gente y el bienestar de los pobres por encima de una ideología política”, expresó el funcionario.
Nasralla reiteró que la presencia de la mandataria, Xiomara Castro, era importante para el país por diversos aspectos, entre ellos, el tema migratorio, donde alrededor de 55,000 hondureños están pujando por una renovación del TPS.
“Creo que ante la ausencia de Honduras, Guatemala y México el problema migratorio no se va a tratar en la Cumbre”, señaló. “Esto sería una consecuencia para los que residen en EEUU desde donde se envían remesas”, agregó.
El vicepresidente hondureño mencionó que la economía nacional quedaría “destrozada” en caso de una interrupción en la línea de las remesas, mismas que representan una cuarta parte en los ingresos de Honduras.
Ante las versiones que la figura de Nasralla estaría viéndose relegada en el papel del actual gobierno, el funcionario respondió que no se siente marginado para nada.
“Yo me metí a política para defender al pueblo hondureño, hice una alianza que permitiría un gobierno conjunto con Xiomara Castro, infortunadamente eso no se está dando y es mi deber decirle al pueblo”, expresó.
“No me siento marginado de absolutamente nada, me siento feliz, es más, les anticiparé que voy a salir de viaje a una reunión con empresarios este fin de semana que quieren invertir en Honduras”, dijo.
Salvador Nasralla sostuvo que no está en planes de pelea con ninguno de los altos miembros del gobierno “sólo estoy diciendo lo que pasa para que después la gente sepa lo que sucedía”.
El coordinador del Partido Salvador de Honduras (PSH) afirmó que no se siente resentido ni mucho menos herido. Aseguró que no sufre de esas situaciones porque su deber como persona instruida es decir cuál es el camino.
En cuanto al precio de los combustibles el Designado Presidencial reiteró que ese no es problema del gobierno, sino de una crisis mundial producto de la pandemia y la guerra ruso ucraniana.
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Con el reporte de: Héctor Murillo