Radio América. Posponer los pagos a las empresas es un alivio en este momento, pero después la carga se va a sentir y no se garantiza que la economía del país va a ser diferente, señaló el economista, Rafael Delgado.
“Esto de postergar el pago solo se trata de postergar la obligación y es muy probable que dentro de dos o cuatro meses la situación de la micro, pequeña, mediana, e incluso de la gran empresa va a estar siendo muy difícil”, manifestó.
Delgado indicó que esta medida debería ser acompaña de otras, pues a su criterio “es mucha mezquindad la aplicación de la política fiscal que es una herramienta importantísima en estos tiempos de crisis mundial”.
El economista detalló que, una vez que se vuelva a la “normalidad” va a tomar tiempo que la economía vuelva a funcionar como lo hacia antes de la crisis por COVID-19, por lo que “es ilusorio pensar que en agosto o septiembre la situación va a estar bien”.
“El Gobierno debería pasar de esa bolsa solidaria que aplica de manera limitada y con gran sesgo político a un verdadero programa de abastecimiento de víveres a toda la población vulnerable del país”, señaló.
Y aunque esto sería con un costo elevado, Delgado recalcó que “el presupuesto General de la Republica es de 280 mil millones de lempiras y una recaudación torturaría de L 106 mil millones, cifras récords”.
Por lo que dijo que, al ser restructurado con un criterio de beneficio al todo el país, puede dar resultados y puede servir a ayudar a los millones de hogares que no podrán acceder a alimentos básicos durante la cuarentena.
Sobrevivencia de las empresas sin trabajar
“La pequeña y la micro empresa no pueden, ya dos semanas de paralización económica y de obligaciones de pago de salarios, es un esfuerzo heroico que están haciendo”, explicó.
Por lo que sugirió que en este momento se debe dar un subsidio al empleo, para garantizar alrededor de 700 mil empleos que generan estas áreas.
“Con los recursos que posee el Gobierno y sin necesidad de endeudarse o pedir la condonación de la deuda, se puede hacer un subsidio de al menos el 50 por ciento del salario mínimo legal a la micro y pequeña empresa”, detalló.
Delgado añadió que, con los altos salarios de diputados, los altos presupuestos de casa presidencial y la “corrupción que impera en el Gobierno” se puede ayudar en gran medida a estas empresas, que se encuentran en riesgo de ser cerradas por la suspensión laboral, que lleva dos semanas y se alargó por otras dos más.
Finalmente explicó que el dar solo la mitad de los salarios a los diputados no es un ahorro millonario, es una solución moral, y que el verdadero ahorro se verá reflejado en no dar “partidas a los diputados y la junta directiva del Congreso Nacional da para proselitismo”.