Radio América. Luisa y Enoc, Fátima y Guadalupe, son solo algunos de los casos de secuestro de menores que han registrado recientemente en Honduras y América Latina.
Y es que una creciente ola de secuestros se ha intensificado en los últimos meses en varios países de Latinoamérica, incluida nuestra nación, lo que ha elevado las alarmas sobre posibles casos de tráfico de órganos o prostitución infantil, así como preocupación por la sociedad actual.
Cientos de niños desaparecen anualmente en nuestro país, pero han sido dos casos específicos que han llamado la atención de hondureños y extranjeros.
Enoc Misael Pérez Chinchilla
El menor de 12 años, desapareció desde el pasado mes de noviembre en Tela, Atlántida, y hasta la fecha no se sabe nada sobre su paradero.
Enoc llegó a Honduras el pasado 18 de noviembre para visitar a sus abuelitos, pues desde 2012 vivía en España junto a su madre Karina, quien lo envió al país como regalo de cumpleaños.
Sin embargo, este viaje se convirtió en la peor pesadilla para él y su familia, pues el día que desapareció su abuelo y tío fueron asesinados, pocos días después su niñera apareció muerta y semienterrada, y a casi cuatro meses de este hecho, no se sabe cuales fueron los motivos por los cuales lo secuestraron.
Pero su madre no se rinde y en su corazón siente que su hijo aun se encuentra con vida y pronto aparecerá.
Luisa Marisela Martínez
Hace poco más de un mes, Luisa de 11 años desapareció en la colonia 6 de Julio de El Progreso, Yoro.
Su madre, Ana Hernández, ha solicitado ayuda a las autoridades, pues hasta el momento no han tenido alguna noticia o pista del paradero de la menor, quien tiene todo su futuro por delante.
La desesperación de sus padres por conocer su paradero ha conmocionado al país entero, quienes han solicitado al presidente, Juan Orlando Hernández, les ayude a encontrarla, pues este es “un dolor tan fuerte para mi familia, ya es mucho tiempo y no sabemos nada de ella”.
Fátima Cecilia – México
El caso de Fátima conmovió a México y demás países del mundo, pues la menor de tan solo 7 años fue secuestrada, violada, asesinada y su cuerpo fue encontrado dentro de una bolsa plástica en la Ciudad de México.
El grotesco hecho ocurrió el 11 de febrero cuando la niña desapareció en las puertas de la escuela a la que asistía.
De acuerdo a las investigaciones realizadas por las autoridades mexicanas, los culpables del hecho fueron una mujer identificada únicamente como Giovana, quien la sacó de la escuela, y su pareja sentimental, identificado como Marío Alberto, quien abusó de la menor.
Este caso sirvió como cuestionamiento sobre la seguridad en los centros educativos del país norteamericano, así como generar conciencia sobre los feminicidios que azotan a la mayor parte del mundo.
Guadalupe – Argentina
El caso más reciente sucedió en Argentina, cuando el cuerpo de una niña de tan solo 8 años fue encontrado calcinado dentro de un apartamento en la ciudad de Lobos.
Según la información recabada por las autoridades de este país, el primo de la madre de la menor habría cometido el hecho luego de, posiblemente, abusar de ella.
El hecho ocurrió el pasado domingo 1 de marzo, cuando el hombre identificado como Sergio Ramon Olivera de 22 años, llegó a la casa de la madre de Guadalupe para llevar a la niña a jugar con su hija.
Sin embargo, está nunca llegó a su destino, pues Olivera la llevó a un apartamento que había alquilado y cometió el horroroso hecho, mismo que fue descubierto horas después ante la denuncia interpuesta por la madre de la víctima, quien se preocupó al no recibir información de ninguno.
Hasta el momento no se ha podido determinar si Olivera abusó de su sobrina, pues con la intención de borrar todas las evidencias del delito que había cometido, incendió viva a la niña, quien se une a las muchas que han sufrido situaciones similares alrededor del mundo.
Así como estos cuatro niños, miles han sufrido este tipo de abusos en varias partes de América Latina, mismos que en la mayoría de las ocasiones quedan en la impunidad.