Radio América. El sociólogo Armando Orellana, es del criterio que la denuncia de la quiebra y descapitalización de las arcas del Estado, genera decepción, desilusión y desanimo en la sociedad hondureña que ha generado mucha expectativa en términos de salir adelante en la situación de recuperación económica.
“Es deprimente esta situación que escucho en el informe presentado el día de ayer”, dijo.
Orellana, considera que el gobierno debe tener cuidado con este tipo de informaciones, no se trata solo de dar a conocer todo lo hecho por el gobierno anterior.
“Es importante presentar alternativas de solución, ya sea en materia de la cooperación internacional o ver de alguna forma como se puede recuperar los ingresos del Estado y echar andar esos proyectos que reactiven la economía, pero que también generen empleo”, asegura.
Además, el sociólogo manifestó la necesidad de poner al desnudo las situaciones de como han amasado enormes riquezas los funcionarios del Estado y revisar lo que se ha planteado en términos de ajustes salariales, pero para una cúpula que en la elite tienen enormes privilegios.
“En la base social hay gente con una situación de pobreza extrema que ha generado expectativas de mejorar sus condiciones de vida con el nuevo gobierno y con las creaciones de aperturas de nuevos emprendimientos, llámese pequeña o mediana empresa o la posibilidad de la venida de otras inversiones”, expresó.
Si se está hablando de saqueos, dijo, que se enjuicien a esas personas que saquearon el Estado, y que se recuperen los bienes para reinvertirlos en salud, educación, vivienda, etc.
Seguir emigrando, buscando otras alternativas de sobrevivencia o una economía de sobrevivencia, es lo que le espera al pueblo hondureño cuando se da cuenta que el Estado está en bancarrota.
“Es ahí donde surge el reclamo popular, hay que recuperar, donde quedó el dinero; como consigna del pueblo”, concluyó.