Radio América. Una masacre dejó la muerte de cuatro personas la noche del sábado en la colonia La Joya de la capital, esto pese a que en el país rige un estado de excepción desde diciembre de 2022.
El comisionado en condición de retiro, Henry Osorto Canales, consultado sobre el tema, expresó que es muy probable que en la nación centroamericana se sigan viendo ese tipo de escenarios y otros que impactan a la sociedad.
Las muertes múltiples o selectivas, que ya datan alrededor de una decena en lo que va de 2023 en Honduras, son consecuencia también del trabajo separado que llevan a cabo las autoridades del país.
“Aquí lo que no hay es un trabajo en equipo, pues pareciera que alguien quiere superar al otro, generando una especie de discordia interna e institucional. Es la ventaja que tienen los delincuentes porque ellos si se coordinan y se agrupan”, señaló.
“Esa es una demostración clara porque se dan los muertos y no hay ninguna respuesta por parte de la autoridad pública, como es el caso de la Policía Nacional, Policía Militar y demás órganos de inteligencia”, objetó.
El exjefe policial no quisiera pensar, añadió, que el crimen organizado le esté ganando la guerra al Estado de Honduras ante la falta de respuesta contundente en materia de seguridad. “Cada institución debe contribuir con un granito de arena”, añadió.
Osorto Canales apuntó que no es tan difícil dar con los cabecillas de organizaciones peligrosas, el problema, acotó, es cuando la clase política del país “mete la mano”.
“No falta que un cabecilla de esos sea amigo de un político, es ahí cuando para la investigación y remueven al policía que hacía el trabajo correspondiente. Es de esa forma dónde se incrementa y fortalece el crimen”, objetó.
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Con el reporte de: Estela Rovelo