Radio América. La exprimera dama de la nación, Rosa Elena de Lobo fue sometida este martes a una evaluación médica y psicológica en las instalaciones de Medicina Forense en la capital luego que el tribunal lo ordenara la semana anterior cuando solicitaban cambio de medidas.
El expresidente Porfirio Lobo Sosa se hizo presente en las instalaciones de Medicina Forense donde brindó declaraciones a la prensa hondureña.
Inicialmente el exmandatario dijo conocer casos de madres recluidas en la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFS) y que de repente no se tiene el cuidado suficiente de verificar si son culpables o no, dejando en abandono a sus hijos.
Aclaró que no es el caso de su familia porque él tiene la habilidad de atender y cuidar a sus hijos.
El exmandatario manifestó que reducir la delincuencia no solo pasa por reprimir, sino por establecer una vigilancia especial para que se revisen los procesos judiciales de cerca.
“Yo lo que he vivido con doña Rosa, por ejemplo, sé que todo ha sido ilegal, era un trofeo de la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH) para sustituir a otro”, afirmó.
Justicia selectiva
Por otra parte, mencionó que se ha vivido un tiempo muy difícil porque se viene de una justicia selectiva.
En tal sentido, Lobo Sosa alberga la esperanza que en Honduras llegará el día en que se revisará la conducta de los jueces y fiscales en los procesos.
“Yo sé que tiene que llegar ese momento donde se revisen bien los proceso y se actúe apegado a la ley”, añadió.
El exgobernante lamenta que su esposa continúe en la cárcel luego que se le denegara el cambio de medidas.
El nacionalista refirió que “en Olancho tenemos un lema: que la cárcel es para los hombres porque la mujer tiene que cuidar a sus hijos”.
Con información de Douglas Varela