Seis hombres murieron este sábado y uno más resultó gravemente herido, algunos de ellos presuntamente origen colombiano, al explotar una fábrica de explosivos improvisados operada por narcotraficantes, conocida como «narcofábrica», en el occidental estado mexicano de Michoacán.
La Fiscalía General del Estado (FGE) informó a EFE que la explosión ocurrió en los primeros minutos de este sábado, en el poblado denominado como Cenobio Moreno, del municipio de Buenavista Tomatlán, enclavado en la región de Tierra Caliente de Michoacán.
Autoridades suponen que el estallido ocurrió cuando las víctimas estaban en una pequeña construcción que simulaba una vivienda, donde elaboraban artefactos explosivos que utilizan sicarios para arrojarlos con drones, colocarlos en caminos como minas terrestres o detonarlos como proyectiles en morteros improvisados.
La explosión provocó que algunos de los seis hombres murieran calcinados y otros por quemaduras de tercer grado, mientras que un séptimo sujeto sufrió graves heridas y la amputación de sus manos, por lo que lo trasladaron a un hospital regional en Tierra Caliente.
Los cadáveres ingresaron al Servicio Médico Forense (Semefo) de la Fiscalía estatal, a la espera de su identificación, aunque autoridades presumen que algunos podrían corresponder a sicarios de nacionalidad colombiana.
Habitantes del poblado pidieron el auxilio de soldados y agentes de la 43 Zona Militar, de la Guardia Nacional y de la Guardia Civil (Policía Estatal), quienes desactivaron diversos artefactos esparcidos en la zona.
De acuerdo con una de las principales hipótesis de la Fiscalía, la “narcofábrica” de explosivos la operaba el Cartel de Los Blancos de Troya, una organización criminal que dirige César Alejandro Sepúlveda Arellano ‘el Bótox’, uno de los narcotraficantes más buscados en Michoacán.
‘El Bótox’ es identificado por autoridades como un aliado del Cartel de Los Viagras, un grupo de narcotraficantes que en febrero del 2013 surgió como escisión de los civiles grupos de autodefensa, que se levantaron en armas contra el entonces cartel hegemónico de Los Caballeros Templarios, organización criminal que se escindió del grupo de narcotraficantes de La Familia Michoacana.
Actualmente, Los Viagras hicieron pública una alianza criminal con el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), para enfrentar a Los Caballeros Templarios que operan con el apoyo del Cartel de Tepalcatepec.
Ambas alianzas criminales iniciaron una serie de cruentos enfrentamientos desde el pasado lunes 19 de agosto, en poblados de Buenavista y los municipios colindantes de Tepalcatepec y Apatzingán.
Estos grupos de narcotraficantes se disputan el control de la producción y tráfico de drogas como marihuana, cocaína y metanfetamina, además de otras actividades como el secuestro y extorsión a productores de limón, ganaderos, agricultores, comerciantes, transportistas y empresarios.
Apenas el viernes, siete soldados resultaron heridos, dos de ellos de gravedad, tras el estallido de artefactos explosivos improvisados que intentaban desactivar en el poblado de Eréndira, también en Buenavista Tomatlán, donde el 28 de agosto decomisaron otra “narcofábrica”. EFE