Radio América. El presidente del Sindicato de Trabajadores de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (STENEE), Miguel Aguilar, indicó este miércoles que una misión del FMI ya se encuentra en el país y que estaría presionando para la escisión de la estatal eléctrica.
“Hay una fuerte presión de los organismos multilaterales para que la ENEE sea dividida”, dijo el dirigente en referencia también al decreto que fue retirado del Congreso Nacional para algunas modificaciones.
En ese sentido esperan que la iniciativa de decreto que se prevé aprobar bajo el establecimiento de la Ley General de la Industria Eléctrica porte todas las “salvaguardas”.
Añadió, que apuestan para que la ENEE continúe siendo una empresa estatal operada desde el Estado como “modelo competitivo” sin ser puesta en “bandeja de plata”.
Aguilar manifestó que en el marco de una revisión del Fondo Monetario Internacional al Ejecutivo deben quedar tácitas las garantías de los trabajadores.
Apuntó que el fortalecimiento institucional es importante para el país al considerar que la ENEE cuenta con la capacidad de competir en cualquier estatus de contrato.
“Nos deben de dar el oxígeno institucional para salir adelante”, comentó el sindicalista en declaraciones a Radio América.
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Aguilar señaló que el modelo energético debe cambiar de forma integral y debe incluir otros actores.
El miembro del STENEE precisó que Honduras debe generar competencia en igualdad de condiciones para que la población tenga acceso a un precio de kilovatio más bajo.
“El manejo que le han dado los gobiernos a la ENEE no ha sido apropiado y el tema energético ni siquiera se toca por los candidatos a cargos de elección popular”, agregó.
En consecuencia pidió al Ejecutivo que en las modificaciones cierre totalmente las puertas a una posible privatización a fin de que los privados no puedan colar.
Aguilar, acotó, que como vigilantes estarán atentos a todos los movimientos que puedan surgir debido a las presiones de los entes multilaterales.