Radio América. El cardenal hondureño Óscar Andrés Rodríguez volvió a reiterar una vez más en la homilía dominical en Tegucigalpa un alto a la indiferencia y las diversas formas de discriminación que viven muchos compatriotas a causa de la pandemia del coronavirus.
Citando el texto del libro de Juan, capítulo 14, en el que Jesús sostiene una interacción con Felipe, el líder de la iglesia católica en Honduras reflexionó diciendo que la sociedad continúa viviendo una “vida material” llena de “sentimientos inhumanos”.
Cardenal recordó aquella escena en la que Jesús hacía énfasis de ser el camino, la verdad y la vida. Fue en ese entonces cuando Felipe le dijo: “Señor, muéstranos al Padre y eso nos basta”.
Sin embargo Jesús le respondió: “Felipe, hace tanto tiempo que estoy con ustedes, ¿y todavía no me conocen? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre”.
“Que triste que Jesús nos dice a los hondureños, tanto tiempo he estado con ustedes y todavía no me conocen”, apuntó diciendo.
El prelado meditó preguntando si en verdad todos aquellos pobladores de un barrio o comunidad que se oponen a un entierro ¿conocen a Jesús?
“Si no conocemos a Jesús, brotan del corazón sentimientos inhumanos y eso es lo que son, unos inhumanos”, sentenció.
Cabe mencionar que a mediado de semana se registró un episodio de represión por parte de los vecinos del sector La Era, en el Este de la capital, quienes tuvieron que ser disuadidos por las autoridades policiales al oponerse armados de piedras y palos al sepelio de una persona muerta por COVID-19.
Al conocer que un vehículo de una funeraria llevaba a sepultar el cadáver de una persona, presuntamente víctima del coronavirus, un grupo de moradores del sector bloqueó la calle que conduce hacia el camposanto para impedir el paso del carro fúnebre ante el temor de ser contagiados por el letal virus.
En ese sentido el cardenal manifestó que en tiempos de esta pandemia ha sido evidente cómo brota de cada uno de los humanos lo mejor y lo peor.
“Si seguimos el camino de Jesús va a brotar lo mejor. Su amor a los más necesitado hacen visible al Padre”, apostilló.
El líder religioso invitó a la ciudadanía a mantenerse lejos no sólo del pecado que “esclaviza”, sino también de “la mediocridad”, que es como una “arterioesclerosis del espíritu”, la cual se ve limita al flujo de vida.
“El coronavirus está matando a tantas hermanas y hermanos, situación que Jesús no ha querido. El causante de todo esto no es Dios, es el ser humano que se parta de Dios, que no sigue y no acepta al Cristo de la vida”, exhortó.
En Honduras por diferentes razones no todos están cumpliendo con el confinamiento ordenado por el Gobierno desde mediados de marzo, cuando se confirmaron los primeros tres casos de COVID-19.
“Los irresponsables que salen a la calle sin la mascarilla, aquellos que no buscan las medidas de higiene que se nos han pedido, esos no quieren a Cristo y se convierten en cómplices de que otros pierdan la vida. Tenemos que pensar en esto”, cuestionó.
Mencionó de casos que ponen como excusa la pobreza manifestando no poder colaborar en nada. “No es cierto eso, tu puedes colaborar no saliendo de casa sino lo necesitas”.
“Aun poniéndose una mascarilla regalada estamos mostrando solidaridad a fin de no transmitir el mal que signifique la muerte de otro”, dijo.
Planteó reflexionar un momento si tuviésemos que presentarnos ante el Señor, como nos presentaríamos, sí lleno de corrupción, pecado o de sangre inocentes.
“Todos quieren gozar de esta vida sin ninguna moral”, abundó diciendo en referencia a la vida mal habida.
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