(Radio América). El himno a la Madre hondureña es una composición artística del poeta, escritor, político y catedrático, Augusto C. Coello Estévez, quien en esta fantástica creación expresa el sentimiento de un hijo agradecido con Dios por el amor y la esperanza que solo una madre puede ofrecer.
De tal manera, el respeto a la madre se muestra en todos los extractos sociales con mucho amor y rindiendo honores a mujeres que diario muestran la fortaleza frente a los distintos obstáculos que se les puedan presentar.
Las celebraciones se llevan a cabo, en la mayor parte de las instituciones educativas, religiosas, políticas y laborales del país.
“La madre, es la madre, única e indeleble, gracias a ella venimos a este mundo. Lástima que muchas ya partieron por aquel ignoto camino que mañana cruzaremos. Benditas sean todas las Madres hondureñas y las del mundo entero”, J. F.
Himno a la madre
Letra: Augusto C. Coello
Música: Rafael Coello Ramos
Coro
En el nombre de Madre se encierra
la más alta expresión del amor
porque no puede haber en la tierra
una imagen más clara de Dios.
Solo
Cuando abrimos los ojos inquietos
al primer resplandor de la vida
en su pálida faz conmovida
nuestra dulce y primera visión
Y al entrar al ignoto camino
a su sombra benéfica y santa
cada espina que hirió nuestra planta
la convierten sus manos en flor.
Madre, que eres consuelo en el llanto
la esperanza y la fe del camino
Árbol bueno que dá al peregrino
el descanso, el abrigo y la paz
santifica tu amor de tal modo
que Dios mismo al morir torturado
sublimó su martirio sagrado
con tu beso postrero en su faz.
Como un culto hoy Honduras consagra
a tu gloria inmortal este día
Madre que eres el bien, la alegría
el amparo, la luz y el perdón
Que tu excelsa virtud traspasando
el misterio de edades remotas
se dilate en las cálidas notas
que palpitan en esta canción.