Radio América. Al menos tres menores ingresaron en las últimas horas al Hospital para Niños Quemados en Tegucigalpa.
Un pequeño procedente del departamento de La Paz ingresó la mañana del 1 de enero a eso de las 4:00 am afectado por agua caliente sus glúteos y brazo izquierdo. De momento estable su salud.
Luego a las 11:00 de la mañana procedente del barrio Los Pinos de la capital se atendió a un menor de 13 años que temprano se levantó a buscar “cuetes”.
El jovencito se encontró entre los desperdicios un mortero tipo “cebolla” y al querer abrirlo con un machete en el impacto la expansión lo lastimó lesionándole tres dedos de la mano izquierda.
Una pequeñita de apenas 4 años también fue víctima de los accidentes por agua caliente en la colonia Cerro Grande de Tegucigalpa al derramársele una sopa instantánea sobre el muslo.
“Tenemos sala llena” dijo uno de los médicos encargados del centro donde para este día se tenía previsto el proceso de quirófano para ocho “pacientitos”.
En total son 15 los menores que se encuentra hospitalizados aún por percances suscitados en la temporada decembrina.
Mientras que en el Hospital Escuela un joven de 24 años de edad procedente de la aldea La Calera (carretera a oriente) sufrió una fractura de dedo al manipular una varilla de “cuete”, la cual tuvo mecha rápida.
Con este último ingreso las autoridades de dicho centro contabilizaron durante las fiestas de Fin de Año al menos 11 afectados (6 adultos y cinco menores).
En general el 2018 cerró a nivel nacional con 64 personas quemadas por utilizar pólvora; 17 de ellas afectadas entre el 31 de diciembre y 1 de enero.
En relación al año anterior la cifra se redujo en 52 personas en vista que en el periodo del 2017 el conteo fue de 116 ingresados.