Para el entrenador de Platense, Carlos Orlando Caballero, el arbitraje incidió fuertemente en el empate 0-0 contra Motagua del domingo pasado, por la ida de la repesca del torneo Clausura de Honduras.
Tanta es la indignación del estratega que en un momento expresó que siente que les robaron el partido, debido a un gol lícito invalidado por el árbitro Erick Andino por una inexistente mano del delantero platensista Jeancarlos Vargas.
“Llamé al señor Pedro Rebollar cuando me enteré que iban a poner a Erick Andino como árbitro, yo quería que pusiera a otro, uno con gafete Fifa pero nunca me contestó la llamada, solo le contesta a los equipos grandes”.
“Nos robaron el partido, siento impotencia. Viendo la jugada me doy cuenta que más bien le pegó en la mano al defensa de Motagua. Vargas nunca la baja con la mano, estoy tragándome esta amargura pero con la convicción de que Dios es justo. Si no invalidan ese ese gol hubiese cambiado la historia”, sentenció Caballero.
Motagua recibirá a Platense este domingo en el Estadio Nacional de Tegucigalpa por el juego de vuelta. Mientras a los azules una victoria o un empate los convierte en semifinalistas, a los escualos solo les vale el triunfo para avanzar de fase.