Radio América. El Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) reveló este martes, un día después que la Corte Suprema de Justicia (CSJ) ratificó la extradición del exmandatario Juan Orlando Hernández a Estados Unidos, un movimiento de traspaso de bienes de la exprimera dama Ana García a un banco hondureño.
Según lo revelado por el órgano anticorrupción, el pasado 21 de marzo, a siete días de conocer la resolución final sobre su extradición, su esposa Ana García, en nombre de Juan Orlando Hernández e Inversiones del Río S. de R.L., trasladó bienes valorados en un aproximado L 60 millones a un banco hondureño en concepto de dación en pago.
El CNA detalla que la dación en pago por Ana Rosalinda García en nombre de Juan Orlando Hernández e Inversiones del Río S. de R.L. es un traspaso del bien “Hato de Enmedio y Villas Palmeras” valorado en más de 28 millones de lempiras.
Un segundo bien nombrado “Finca Rústica El Higuerito” con un valor cercano a los 32 millones de lempiras. Ambos bienes se estiman rondan el valor de 61 millones. No obstante, dicha investigación revela que el 6 de noviembre del 2020 también hubo una dación en pago de un bien inmueble a la misma entidad bancaria llamado “San Francisco del Corral y San Felipe” por un valor de 41 millones en moneda nacional.
Ante ese movimiento, el CNA pregunta al fiscal general Óscar Chinchilla: ¿Por qué el Ministerio Público no aplicó la acción penal de privación de dominio de estos bienes, si existen indicios de que son productos del narcotráfico?
En ese sentido a través de otra interrogante el Consejo Anticorrupción exhorta: ¿y para cuando el Ministerio Público actuará con el resto de los bienes del expresidente, para evitar que haya más procesos de dación en pago?
Cabe destacar que la dación en pago es un método de pago para solventar deudas. Está basado en la entrega de un bien con el fin de cumplir pagos pendientes. A título de pago, el deudor prescinde de dicho bien con común acuerdo con el acreedor, que acepta dicha compensación como pago.
EXTRADICIÓN
El pleno de la Corte Suprema de Justicia de Honduras ratificó este lunes la extradición del expresidente Juan Orlando Hernández, a solicitud de Estados Unidos, que lo acusa de tres cargos asociados al narcotráfico y uso de armas.
La Justicia estadounidense acusa a Hernández de tres cargos. El primero, por «conspiración para importar una sustancia controlada a los Estados Unidos», con el «conocimiento de que dicha sustancia sería importada ilegalmente a los Estados Unidos» a aguas «a una distancia de 12 millas de la costa de los Estados Unidos».
Además, se le acusa de «fabricar, distribuir y poseer con la intención de distribuir una sustancia controlada a bordo de una aeronave registrada en Estados Unidos».
El segundo cargo, es por «usar o portar armas de fuego, o ayudar e instigar al uso, el poder y la posesión» de «ametralladoras y dispositivos destructivos».
Las armas y los dispositivos destructivos serían «en apoyo de la conspiración de importación de narcóticos de los que se le acusa en el cargo uno».
El cargo tres se refiere a una «conspiración para usar o portar armas de fuego, incluyendo ametralladoras y dispositivos destructivos, durante y en relación con, o poseer armas de fuego, incluyendo ametralladoras y dispositivos destructivos, en apoyo de la conspiración de importación de narcóticos», según un informe que la Embajada estadounidense le envió a la Cancillería hondureña el 14 de febrero.
Hernández, de 53 años, dijo hoy en una carta publica que es «inocente» y «víctima de una venganza y una conspiración. Estoy seguro que Dios me hará justicia».