Radio América. El Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) ha hecho oficial este jueves su retiro como veedor de los procesos de adquisición de vacunas contra la COVID-19 en Honduras.
El ente de sociedad civil ha determinado hacerse a un lado debido a la desidia, inacción y falta de garantía gubernamental para la compra de tan vital medicamento.
El Gobierno de la República se encuentra en negociaciones directas desde hace algunas semanas con las casas farmacéuticas para la compra e importación de las vacunas anticovid.
En ese sentido la Secretaría de Salud anunció el pasado 22 de febrero la conformación de un Consejo de Veeduría para verificar la transparencia en la adquisición de la vacuna.
En razón de lo anterior el CNA participó en una reunión para coordinar todos los puntos que conllevarían al proceso de adquisición con una empresa internacional.
No obstante, el 24 y 26 del mismo mes, se desarrollaron reuniones en las que se les proporcionó la información previa a la contratación con los vendedores.
“Ha transcurrido más de una semana y hasta la fecha no observamos avances para la adquisición de la vacuna”, explicó el organismo anticorrupción.
El CNA en ese sentido ha externado su preocupación pues el viernes 26 de febrero Alba Consuelo Flores en su condición de secretaria de Estado recibió una notificación por parte del mecanismo GABY-COVAX en el que le hicieron saber la imposibilidad por parte de dicho ente en poder vender a Honduras 1.9 millones de dosis.
“Pero dicha información no ha sido socializada con el pueblo hondureño quien tiene el derecho inalienable de conocer los avances y retrocesos que se vayan presentado durante el proceso de adquisición”, señaló.
“Es importante dejar muy en claro que, a pesar de Ia reuniones y supuestos esfuerzos, los hondureños no tenemos garantizada una vacuna que otorgue un ápice de esperanza para sobrevivir bajo una administración pública colmada de inexpertos, ineficientes e imprudentes funcionarios”, condenó el CNA en una nota girada a la titular de Salud.
Comunicado: