Radio América. Wilmer Vásquez, director ejecutivo de la Coordinadora de Instituciones Privadas Pro las Niñas, Niños, Adolescentes, Jóvenes y sus Derechos (COIPRODEN), manifestó que el 2020 ha sido un año bastante difícil para la niñez y la juventud de este país.
“Este 2020 ha sido un año bastante difícil en general para el pueblo hondureño, pero de manera particular para la niñez y la juventud de este país, quién es a consecuencia de ese distanciamiento social producto de la pandemia por Covid-19 y los fenómenos naturales Eta y Iota qué han dejado grandes consecuencias en el país y han afectado terriblemente a la niñez y a la juventud”, dijo Vásquez.
En ese sentido, agregó que, “hay que sumar esa gran desigualdad social, el fracaso del trabajo y el rol que tiene que tener la institucionalidad pública en nuestro país, la dispersión de las acciones desde las instituciones del Estado y la corrupción que ha carcomido los recursos que deberían de estar destinados para la implementación de políticas públicas, todo esto ha venido a tener consecuencias terribles para la niñez y la juventud”.
Asimismo, indicó que, “más de dos millones de niños y jóvenes se han quedado sin formación regular en nuestro país, porque no han tenido acceso a una verdadera educación producto de que no tienen las condiciones de un teléfono móvil, de una computadora y mucho menos acceso a internet”.
Información de Javier Rivera