Radio América. En una ceremonia celebrada ayer martes asumió como nuevo jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Honduras (FFAA) el contralmirante José Jorge Fortín en sustitución del general Tito Livio Moreno Coello.
No obstante, trascendió que miembros de la XXIV Promoción de Oficiales de las Fuerzas Armadas se mostraron molestos por la forma en que asumieron el mando promociones previas y no las que según la ley corresponden.
Al respecto, el abogado constitucionalista, Juan Carlos Barrientos, manifestó que en cualquier academia militar del mundo se respeta la antigüedad, es decir que los con mayor antigüedad tienen el máximo respeto de los que van entrando.
Indicó que eso se va cultivando a lo largo de los años que van estudiando en la academia militar, a tal grado que cuando se gradúan tienen bien acendrado el principio de respeto y liderazgo.
En ese sentido, consideró que es una contradicción que cualquier persona que medio conoce el tema militar ascienda a miembros que no tienen la antigüedad para que manden e impartan órdenes a los que durante toda la academia fueron sus líderes.
El constitucionalista señaló que pese a que la Constitución de la Republica establece que las FFAA son apolíticas, en los últimos 12 años han salido muchos generales políticos y proclives al Partido Nacional.
“Por esa razón han sido seleccionados muchas veces violentando el principio de antigüedad y liderazgo, y eso en el seno de las instituciones provoca crisis, esas crisis no trascienden pero ese descontento va creando condiciones para que se descomponga la institución”, dijo Barrientos.
A su criterio, por “cortesía política” se debió haber esperado a que tomara posesión la nueva presidenta electa de Honduras, Xiomara Castro para que fuera ella la que designara al jefe del Estado Mayor Conjunto de las FFAA.
Sin embargo, expresó que vacando de su cargo el general Tito Livio Moreno, el presidente Juan Orlando Hernández tenía la facultad de nombrar a una nueva persona para sustituirlo porque la Constitución de la República señala que en caso de ausencias temporales desempañará el cargo el subjefe del Estado Mayor Conjunto de las FFAA, el inspector general o bien podrá hacerlo el oficial general superior.
“La Constitución de la República no señala plazo ni dice cuanto tiempo tiene que durar el jefe de las FFAA y establece que puede ser nombrado o removido libremente por el presidente de la República. Lo que hay que hacer es reformar la Ley Constitutiva de las FFAA con el objetivo de abolir el plazo de dos años para el nombramiento del jefe, dejarlo como dice la Constitución y hacer un agregado para que no se pueda nombrar si no es respetando la antigüedad de las promociones”, sugirió Barrientos.
De esa forma aseguró que se despolitizaría totalmente la institución castrense porque le pondrían un límite y un marco al presidente de la República dejándole claro que no puede nombrar al que le da la gana, sino al que corresponde según la ley.
Con información de Lesman Aníbal Morazán