Radio América. El empresario y exdirector de la Asociación Nacional de Industriales (Andi), Adolfo Facussé, cree que Nicaragua e Israel se negaron a alojar un “narcotraficante”, en referencia a las versiones que el expresidente Juan Orlando Hernández buscó asilarse en los países antes mencionados, previo a ser solicitado en extradición por Estados Unidos.
Esta opción de acuerdo a Facussé, era una de las alternativas del exmandatario para no enfrentar la justicia norteamericana, que lo acusa de tres delitos asociados al narcotráfico, conspiración y uso de armas destructivas, explosivos, entre otros.
“Él -JOH- tenía buenos amigos en Israel y fue uno de los pocos sirvientes que tuvo EEUU para trasladar la embajada de Tel Aviv a Jerusalén, además, tenía mucha amistad con el presidente de Nicaragua, pero ningún país lo quería aceptar», manifestó el empresario al espacio noticioso dominical de Radio América.
Para el entrevistado, “Israel no se iba a sentir bien alojando un narcotraficante en su país, mientras tanto Nicaragua tampoco quería ser reducto de narcos, o sea que la solución para escaparse de una extradición era fregada”.
Pero, expresó que la segunda alternativa de Hernández Alvarado para eludir ser uno más de la cifra de extraditables, era la defensa natural, un caso judicial abierto en Honduras.
“La defensa más natural que tienen los criminales en este país es alegar que tienen un juicio, porque primero deben terminar ese juicio en Honduras y después se les aplica la extradición”, explicó Facussé.
Sin embargo, recordó que el extitular del Ejecutivo no tiene un caso abierto por ningún delito, pese que ahora se buscan las maneras de dar apertura a un expediente en el Ministerio Público.
“Que ironía, JOH tenía tan controlado el sistema judicial que no permitía que se le acusara de nada. Ni en el Ministerio Público, ni la Corte Suprema de Justicia van encontrar quejas del acoso que hacia JOH porque nunca les dieron un curso, pero hoy están buscando algo en contra de él”, cerró.
El próximo 16 de marzo, Hernández volverá a comparecer ante el juez natural de extradición, en una audiencia de «evacuación y elementos de pruebas», mientras tanto, permanecerá bajo la figura de detención provisional en la base del Comando de Fuerzas Especiales de la Policía Nacional.