Radio América. El excanciller de la República, Guillermo Pérez Cadalso al referirse a la fuga del cabecilla pandillero alias “El Porky” y a los juicios virtuales anunciados, debido a lo ocurrido en el juzgado de El Progreso, Yoro, manifestó que el concepto de seguridad no es solo andar con guardaespaldas o que haya policías resguardando los edificios judiciales.
Para el entrevistado, el tema de seguridad es mucho más amplio el cual comienza desde el momento de la investigación para identificar quienes están planeando perpetrar crímenes contra el Estado de Honduras.
El exministro de Relaciones Exteriores señaló que se ha visto la fragilidad a la hora de transportar los reos desde el centro de reclusión a los juzgados. “Siempre hay varios kilómetros de distancia y eso vuelve vulnerable el viaje en detrimento de los policías y a las autoridades judiciales que llevan privados de libertad de alta peligrosidad”, añadió.
Ante eso, el exfuncionario mencionó una serie de medidas de seguridad complementarias que, a su criterio, comienzan desde la investigación, prevención, el redoble de la seguridad policíaca y el uso de la tecnología del Siglo XXI.
Asimismo, consideró el aumento presupuestario y el equipo a las fuerzas de seguridad estatal en el sentido de evitar actos sangrientos como la muerte de cuatro policías tras un ataque de pandilleros de la MS-13 para liberar a “El Porky”.
En cuanto a las audiencias virtuales, Cadalso dijo que eso es una necesidad evidente los cuales ya funcionan en otros países el cual evita que “la incidencia criminal sobre nuestros jueces, fiscales y operadores de justicia, puedan volcarse en hechos tan deleznables como los ocurridos la semana pasada”.
Escuchas Telefónicas.
Pese a Ley de Escuchas Telefónicas y más los operativos realizados para capturar al mencionado jefe pandillero, Caldalso expresó, “esa es la pregunta de los hondureños, en la que se supone que las medidas que las autoridades están tomado para la investigación de los operadores de justicia son extremas como las pruebas de confianza, polígrafos y otras, pero aun así vemos que son vulnerables, en donde pueden ser tentados por el crimen organizado, la extorsión en contra de la familia o porque se está comprando el cohecho”.
“Yo creo que el sistema de seguridad en Honduras ha mejorado ostensiblemente, las estadísticas así lo dicen, pero cuando suceden algo como eso, pues hay que volver a revisarlo porque nunca hay soluciones mágicas y tampoco hay que dormirse en los laureles”, instó.
Para don Guillermo, la revisión de los esquemas de seguridad deben ser permanentes y actualizarlos porque el crimen organizado también se actualiza todos los días.
Información: Nelson Murillo