VOA-Radio América. Honduras inició el año escolar marcado por la pandemia del COVID-19 y busca establecer como reto primordial mejorar la conectividad y evitar la deserción escolar.
Con el objetivo de matricular a 2 millones de estudiantes y disminuir la deserción escolar generada por el cierre de escuelas y colegios a nivel nacional en Honduras a causa del COVID-19, autoridades educativas inauguraron el año escolar 2021 y plantearon los retos que implicará la enseñanza en medio de la pandemia.
Sin embargo, las cifras de deserción en escuelas y colegios, según los reportes de la Secretaria de Educación, indican que más de 300.000 estudiantes perdieron sus clases. El ministro de Educación, Arnaldo Bueso, anunció que las nuevas modalidades de trabajo responden a lineamientos que buscan la permanencia de los estudiantes en las aulas.
“Continuaremos con un programa masivo de capacitación de enseñanza a nuestros docentes pensando en nuevas tecnologías se han enviado nuevos lineamientos para la nueva estrategia educativa para orientar la educación”, dijo el funcionario.
Mientras tanto el docente hondureño Carlos Sabillón remarcó que se habla de erradicar la deserción escolar, pero advirtió que un gran porcentaje de estudiantes no puede acceder a clases virtuales.
“Muchos alumnos no pueden pagar recarga o no tiene conectividad o la falta de pago en su matricula. Todo eso afecta y otros centros tienen más afectado, además de señales de internet inestables un 20 o 30% no terminaron el pasado año escolar”, explicó el profesor.
La estudiante Luna Camila expresó su alegría pese a la incertidumbre que rodea al nuevo año escolar: “El reinicio de las clases par mi significa felicidad de ver a mis compañeros y maestros ya que aprendo en un nuevo grado escolar”.
Según el Observatorio de Educación de la Universidad Pedagógica Francisco Morazán solo un 35% de la población hondureña cuenta con conectividad y esa es la principal razón para la deserción escolar.
Fuente: VOA Noticias
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