Radio América. El hospital móvil de Villanueva, Cortés no ha entrado en funcionamiento porque el personal que se esta contratando renuncia a los dos días al ver la magnitud de los casos de COVID-19 en Cortés, releva la directora departamental de Salud en la zona norte, Dinora Nolasco.
“No es que ha estado en abandono es que faltan procesos, a parte que hay mucho médico hondureño que no quiere trabajar con este virus, hay mucho temor en las enfermeras y médicos, eso es algo que la Secretaría de Salud no lo ha dicho, no lo quiere decir, pero es una realidad”, expresó Nolasco.
Según la galena, en el país no hay muchos intensivistas, solo 8 en Cortés y 8 en Tegucigalpa, motivo por el cual es muy difícil atender los casos de gran magnitud en ese departamento.
Recalcó que no cuentan con licenciadas en enfermerías y médicos que quieran trabajar con el virus.
Con información de Rony Ortiz