Radio América. Mensaje del presidente de la Conferencia Episcopal de Honduras (CEH) y obispo de la Diócesis de San Pedro Sula, Ángel Garachana, este Viernes Santo:
La cruz: amor y dolor
En el Viernes Santo escuchamos la invitación de la iglesia, miren el árbol de la cruz donde estuvo clavada la salvación del mundo. Si con ojos de fe y corazón agradecido contemplamos la cruz del Señor y descubrimos en ella el signo supremo del amor de Jesucristo, decimos con San Pablo: me amó y se entregó a la muerte por mí.
Junto a la cruz nos sentimos radicalmente reconciliados con Dios. Siendo enemigos Dios nos reconcilió consigo por la muerte de su hijo y nos ha reconciliado también entre nosotros mismos.
Cristo crucificado es nuestra paz, Él ha derribado el muro del odio y ha dado inicio en sí mismo a una humanidad reconciliada y pacificada.
Contemplando la cruz del Señor nos inunda un sentimiento profundo de paz y nos crece el deseo y propósito de ser constructores de paz y promotores de reconciliación.
En la cruz del Señor vemos también reflejadas las cruces de la humanidad, el sufrimiento de los enfermos, el dolor de los pobres, el grito de los explotados, la angustia de quienes experimentan los efectos de la guerra y la desesperación que no había sentido a su vida.
Pero también junto la cruz del Señor encontramos el consuelo y la paz; amor y solidaridad que tiende mano y compañía a los crucificados de hoy; encontramos la fortaleza interior; esperanza para transformar situaciones de muerte en procesos de vida y aprendemos que el amor, solo el amor asume, acompaña, redime y da sentido al dolor.