Radio América. El expresidente de la Cámara de Comercio e Industria de Tegucigalpa (CCIT) José María Betancourt, manifestó esta mañana de martes que han venido luchando desde antes que se iniciara la construcción del Aeropuerto Internacional de Palmerola.
Lo que sucede mencionó, es que no hubo voluntad de apoyo principalmente por parte del alcalde capitalino Nasry Asfura.
Explicó que le manifestaron en aquel entonces que el aeropuerto no solo perdería la categoría de internacional, sino que la capital iba a perder miles de empleos directos e indirectos, inclusive, que la misma municipalidad iba a dejar de percibir millones de lempiras anuales por concepto de impuesto.
Pero dijo que al parecer al edil capitalino no le importó puesto que les expresó en ese entonces que no podía estar en contra del presidente de la República de Honduras.
Betancourt entiende que se le debe respeto al titular del Ejecutivo, pero indicó que el alcalde como autoridad de la capital debió haberla defendido como en su momento lo hizo el exalcalde Ricardo Álvarez quien ahora se mantiene en silencio.
“La concesión de Toncontín que se le otorgó a partir del 28 de septiembre del año pasado ha sido una entrega en bandeja de oro porque no hubo licitación, en una sesión espuria del Congreso Nacional se hizo la propuesta que se le otorgara la concesión a Palmerola International Airport (PIA) y que ellos lo administraran”, expuso Betancourt.
Por otro lado, el también miembro de la comisión de defensa de Toncontín solicitó que dejen operando este aeropuerto con las líneas aéreas que están actualmente y a Palmerola con las nuevas líneas que han mencionado con pasajes baratos porque la oferta y la demanda debe prevalecer.
Vuelos regionales
“Los vuelos regionales no pueden existir porque las dos únicas líneas aéreas centroamericanas, una de Panamá y otra con sede en El Salvador y que nació en Honduras como DACA y que ahora es una línea colombiana, no vuelan regionalmente con pasajeros solo de Centroamérica, ellos consolidan pasajeros en Panamá y El Salvador de vuelos que vienen de Europa, Estados Unidos, etcétera”, explicó.
El extitular de la CCIT dijo que la pretensión de Palmerola es administrar todos los aeropuertos de Honduras empezando por la carga y eventualmente forzar el cierre de otros aeropuertos para que solo queden con vuelos nacionales para concentrar ellos toda la aviación en Palmerola.
Enfatizó que Palmeroal ya es un hecho, pero que se debe sostener con las personas que desean viajar por ese aeropuerto pero sin sacrificar la categoría internacional de Toncontín porque sería un golpe a la economía y un peligro desde el punto de vista estratégico.
En ese sentido, suplicó no satanizar al aeropuerto Toncontín que ya cumplió cien años y que debe ser un orgullo. «No es que sea romántico, pero sí defiendo mi capital y aeropuerto, realmente me duele cuando personas tratan con desprecio el aeropuerto”, añadió.
Finalmente, se preguntó de qué sirve celebrar 200 años de independencia si por otro lado quieren tirar en saco roto la historia del aeropuerto Toncontín que es bastante interesante desde el primer aterrizaje el 18 de abril de 1921 hasta la fecha.