Radio América. El Juzgado Penal en Materia de Corrupción dictó en audiencia inicial sobreseimiento definitivo para el exviceministro de Salud, Nery Cerrato por falsificación de documentos públicos.
Asimismo, auto de formal procesamiento para el extitular de la Secretaría de Estado en los Despachos de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales (Copeco), Gabriel Rubí por violación a los deberes de los funcionarios.
Al respecto se ha referido la abogada Doris Imelda Madrid, defensa del exviceministro Cerrato quien dijo sentirse más que satisfecha porque en realidad se hizo justicia.
“Mi defendido, don Nery Cerrato en ningún momento ha faltado a la verdad de los hechos; el tema de la adquisición de esas carpas móviles que inicialmente eran para Roatán y después se instalaron en Villanueva, Cortés, por la urgencia, son temas que se hablaron en la reunión del Consejo Consultivo del Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager)”, explicó Madrid.
La experta en leyes lamentó el actuar del Ministerio Público que indicó sí falta a la verdad al hacer una imputación, ordenar capturarlo y exhibirlo ante la sociedad.
A su juicio, la acusación contra su defendido no tuvo fundamento, y acusó a la Fiscalía de practicar una justicia draconiana.
“No estudian y fundamentan bien los casos y con eso causan daño a la moral de un ser humano que lo único que ha hecho es hacerle bien al prójimo”, añadió.
Las pruebas evacuadas no pudieron demostrar la supuesta participación de los implicados en los delitos de fraude y falsificación de documentos públicos.
Según el requerimiento fiscal, los encausados aprobaron la compra de una sala de aislamiento móvil para la atención de pacientes Covid-19 por un monto de 5 millones 560 mil 278 lempiras mediante contrato de manera directa.
El juez explicó que como representantes del Comité Técnico que se desprende del Sinager, los imputados estaban facultados para sugerir la compra mediante ley, ya que los documentos firmados para la compra estaban dentro de las facultades otorgadas al exviceministro, por lo que no existe delito.
Con información de Estela Rovelo