Radio América. Tres personas señaladas en el caso de corrupción denominada «Patuca III» fueron llevados este viernes a los Tribunales en Materia de Corrupción en Tegucigalpa luego de presentarse voluntariamente ayer ante un Juez con Jurisdicción Nacional en Materia Penal.
Se trata de los abogados Francisco Arturo Mejía, su esposa Waldina Salgado y su hijo Roberto Arturo Mejía, señalados de supuestamente montar el engranaje de escrituras de empresas pertenecientes a la organización criminal “Los Cachiros”.
Por lo que este día los imputados fueron trasladados a los Tribunales Anticorrupción por las autoridades penitenciarias tras habérsele dictado detención judicial.
Medidas distintas a la prisión
“Esta personas se encuentra en otro proceso por lavado de activos y para evitar que chocaran se ha indicado su primera audiencia para el 4 de abril”, explicó la portavoz del Poder Judicial, Lucía Villars.
Luego conjuntamente se unirán a la audiencia inicial con los restantes acusados a quienes hoy se les dictó medidas sustitutivas distintas a la prisión.
A los seis que recibieron medidas sustitutivas el juez competente determinó firmar periódicamente en los Juzgados, la prohibición de salir del país y la no comunicación con personas vinculadas al proceso.
En ese sentido las autoridades han programado para el 8 de abril próximo la audiencia inicial para todos los señalados a excepción de uno al que se le libró una orden de captura por no comparecer en audiencia. Se trata de Gabriel Prieto Gutiérrez.
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