Radio América. El presidente de Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), Juan Carlos Sikaffy dijo que para contener la pandemia del COVID-19 se debe restringir las actividades no esenciales para la vida económica del país.
Afirmó que la empresa privada está comprometida a cumplir los protocolos de bioseguridad, pero este es un compromiso colectivo y que toda la población esté consientes que el virus está aquí.
“En esta época de navidad es difícil por las reuniones familiares y de amigos, pero tenemos y debemos de llevar nuestra actividad a lo esencial, la cual es el mantenimiento de la economía familiar”, manifestó.
Sikaffy en nombre del Cohep hace un llamado a todos los hondureños a cuidarse del COVID, porque afirma que el virus no tiene vacaciones.
Vacuna
Sobre el convenio firmado por el Cohep y el director ejecutivo del Instituto Hondureño del Seguro Social (IHSS), Richard Zablah para la adquisición de 1.4 millones de dosis de vacuna contra la COVID-19, dijo que solo es un respaldo.
“El Cohep está garantizando al IHSS que, si no se aprueba la vacuna de Aztrazeneca, el Cohep va asumir la pérdida del dinero por la vacuna”, aclaró.
Efectos COVID-19, Eta y Iota
Lamentó que la economía venía complicada por la pandemia y se agudizó más con Eta y Iota. Hasta octubre llevamos un millón de empleos perdidos, dijo.
“Por la actividad de la navidad se van a recuperar unos cuantos, pero la economía familia solo se recupera con economía digna, decente y permanente”, externó.
Sobre la revisión del salario mínimo, reveló que el director ejecutivo de la Cámara de Comercio e Industrias de Tegucigalpa (CCIT), Rafael Medina será el representante del sector empresarial.
«No me quiero adelantar, pero por lógica si se han perdido un millón de empleos, aumentar el salario mínimo sería catastrófico para el país, eso solo generaría más desempleo», manifestó Juan Carlos Sikaffy.
Información de Héctor Murillo