Radio América. La Asociación de Funerarias de Honduras denunció una vez más este viernes la gravedad de las autoridades en la entrega directa de cadáveres a familiares, incumpliendo parte del protocolo establecido por el Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager) en el marco de la pandemia.
El presidente de la asociación de la industria funeraria, Edwin Lanza, reveló que ante la disminución de personal forense los parientes de las víctimas sospechosas de COVID-19 se estarían introduciendo a las morgues.
“No hay suficiente personal para colaborar a introducir a sus seres queridos dentro del féretro y lo terminan haciendo ellos provocando el riesgo de contaminación”, detalló.
Estas acciones estarían derivando en la expansión del letal virus a los entornos familiares, apuntó.
“Esta denuncia la hicimos hace un tiempo y ahora tiene validez”, dijo en demanda de más contratación de personal en las morgues públicas y privadas a fin de que los civiles se vean envuelto en esas labores.
Lanza recordó que los denunciado es una amplia violación al protocolo del Sinager en el que se prohíbe a los familiares de fallecidos participar en el embalaje de cadáveres.
“Eso lo debe hacer Medicina Forense o personal funerario”, agregó.
Las muertes por COVID-19 en Honduras se elevaron la noche del jueves a 835 con 10 nuevos casos que registró el Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager). En cuanto al número de contagios este hace un total de 30,867 a nivel nacional.
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