A Laporta le preguntaron por qué siguen sin bajarse del barco pese a que nueve de los doce clubes fundadores lo han hecho: «Ha habido presiones a algunos clubes, pero la propuesta sigue existiendo. Las inversiones son muy importantes, los salarios muy altos y todo esto se ha de tener en cuenta de la misma manera que los méritos deportivos».
Por otra parte el presidente de UEFA, Aleksander Ceferin, se mostró muy comprensivo con Laporta pese a las crÃticas al resto de los dirigentes que montaron la Superliga: «Me decepcionaron todos, pero quizás menos el Barça. Hace muy poco que eligieron a Laporta y hablé con él dos o tres veces».
«Estaba sometido a una presión considerable por la situación económica. Él lo heredó, no fue su culpa que la situación fuera asÃ, por lo que obviamente estaba bajo mucha presión, pero al mismo tiempo, como un negociador astuto, se aseguró una salida. Si pagas de más a los jugadores, jugadores inapropiados y, por lo tanto, no logras un resultado, significa una pérdida», dijo Ceferin.