Radio América. El abogado Joaquín Mejía, se refirió a las recientes declaraciones del secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, quien criticó la decisión de la administración de Donald Trump de reconocer las elecciones presidenciales de Honduras en 2017, que dieron como ganador a Juan Orlando Hernández.
Según Mejía, esta declaraciones solo reflejan tres cuestiones importantes, en primer lugar, indicó que al mandatario hondureño lo están abandonando y viendo como un “apestado”.
Sin embargo, señaló que Almagro ha sido un aliado del presidente Hernández porque señaló que si bien es cierto, denunció el “fraude electoral”, pero luego poco a poco se fue silenciando y acomodándose para ir apoyando al actual mandatario.
En segundo lugar, manifestó que Almagro fue una pieza clave para que la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH), fuera expulsada del país.
Y en tercer lugar, expuso que Almagro ha sido atacado fuertemente por países como Bolivia y Venezuela por el tema de la reelección, pero que en caso de Honduras, se quedó callado, lo que aseguró refleja la “doble moral” del secretario general de la OEA y la responsabilidad que tiene en lo que está aconteciendo en el país.
El experto en derecho dijo que a pesar de la inversión millonaria que ha hecho el Gobierno para poder incidir en el plan internacional, ha sido un total fracaso porque lo que se está observando es que sus aliados lo están abandonando, “se está viendo como un apestado y significa que en el plano internacional está quedando asilado y solo”.
El anuncio de Estados Unidos de la la creación de una fuerza de tarea anticorrupción para el Triángulo Norte de Centroamérica solo refleja por un lado, la falta de confianza en los Ministerios Públicos de Honduras, Guatemala y El Salvador, y por otro lado, el error de no renovar los convenios de la MACCIH y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG).
Con información de Javier Rivera