Radio América. “Necesitamos echar unos demonios que se han posicionado en nuestro país”, propone el arzobispo hondureño, Óscar Andrés Rodriguez en su homilía dominical desde el Santuario de Suyapa.
Expresó que echar los demonios en primer lugar significa sacar el pecado de nuestros corazones. El religioso propone sacar del corazón los demonios de la esclavitud y del homicidio.
Cabe recordar que el Ministerio Público capturó el jueves a los dueños y encargados de un restaurante, que, según investigaciones de la institución, mantenían como esclavos a sus empleados en la capital.
En ese sentido, el cardenal dijo, “echar demonios significa liberar de las esclavitudes, como aquí mismo que se practicaba la esclavitud laboral. El demonio del homicidio, que tristeza que cada semana hay tantas muertes violentas, eso no viene de Dios, el crimen debe ser eliminado empezando por la educación en la familia”.
Además, pide, «echar el demonio entre familia, entre ciudadanos, porque nadie debe odiar a nadie ya que el odio es lo contrario al amor».
Lamentó que los hondureños sigan sin entender lo que significa el respeto de la vida, porque afirma que cada persona es hija de Dios desde la concepción.
“Ya se ha hablado suficiente de esto, pero debemos decirlo claramente, el aborto es un homicida y no lo usen en una propaganda política”, reclamó.
Al mismo tiempo, el cardenal instó a los ciudadanos a ser solidarios con las personas extranjeras que transitan por el país en busca de mejores condiciones de vida.
“No nos cansemos de hacer el bien, tenemos tantos cuadros tristes, centenares de hermanos haitianos que pasan por Honduras, porque en su país no hay futuro y esperanza, y llegan a una frontera y son acosados como si fueran animalitos”, arguyó.