Radio América. Debido a que están prohibidas las autopsias, es difícil que se compruebe que el privado de libertad murió de Coronavirus, declaró este martes la defensora de derechos humanos, Itsmania Platero.
También, dijo ser complicado que las autoridades del Instituto Nacional Penitenciario (INP), realicen una investigación de un privado de libertad que murió por posible Covid-19, en vista de la prohibición de las autopsias y por tanto será difícil obtener el resultado.
La entrevistada cuestionó que la Corte Suprema de Justicia y las autoridades de la Secretaría de Salud, no han hecho una exhibición personal de los reclusos para descartar que ellos padecen de contagios del virus.
“Este es el momento oportuno para proceder al excarcelamiento inmediato de privados de libertad que se han beneficiados y, además, que se tomen en consideración a las personas vulnerables”, sugirió Itsmania en América Noticias.
Platero afirmó que el penal de El Pozo en Ilama, Santa Bárbara, es una de las cárceles que presenta la mayor población carcelaria con problemas respiratorios y en La Tolva de Morocelí, El Paraíso, indicando que las enfermedades han producido deterioro en la salud de los privados de libertad, pero que no han sido señalados por las autoridades de la Corte Suprema de Justicia.
“El hecho de que una persona esté dando señales que hay Coronavirus, es muy grave, porque la población penitenciaria es muy vulnerable, y un caso sería catastrófico para el Estado de Honduras”, enfatizó.
En ese sentido, la defensora de derechos humanos consideró importante no descuidar el tema de la enfermedad en los centros penitenciarios, sino que se priorice la preservación de la vida de los privados de libertad, sus familias y de la población hondureña.
Información: Estela Rovelo