Kaukira (Honduras), 13 nov (EFE).- Las condiciones de vida de los pescadores artesanales de Kaukira, en el Caribe de Honduras, han comenzado a mejorar con una granja fotovoltaica que han puesto en marcha con el apoyo de la organización internacional GOAL y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
«El proyecto será de mucho beneficio para los pescadores de la región porque tendrán una mayor facilidad para producir el hielo para congelar sus productos, que muchas veces botaban en parte porque se les arruinaba por la falta de un refrigerador», dijo a Efe el director de País GOAL, Luigi Loddo.
La granja consiste en una unidad generadora de energía eléctrica con 120 módulos solares fotovoltaicos, con una potencia de 44,4 kilovatios, que disminuirán al menos en un 60 % los costes de producción de hielo para los pescadores de esta región hondureña, cuya impresionante belleza natural contrasta con la pobreza y miseria en la que viven la mayoría de sus habitantes.
LA ENERGÍA ELÉCTRICA ERA UNA NECESIDAD PARA LOS PESCADORES
El Proyecto Resiliencia de la Economía Azul del Ecosistema Costero del Norte de Honduras MiPesca tiene un costo unos 10 millones de lempiras (unos 414.000 dólares).
Lleva el nombre de Sayri Molina, una bióloga hondureña recién fallecida que ayudó mucho a los pescadores artesanales, principalmente a los de Kaukira, departamento caribeño de Gracias a Dios, conocido como la zona de la Mosquitia, al este, limítrofe con Nicaragua, habitado por familias indígenas pobres.
«Sayri Molina está aquí con nosotros aunque no la miremos, pero con su obra, con su hacer, comparte con nosotros estos importantísimos logros», enfatizó Loddo el pasado jueves en la ceremonia inaugural de la granja en la pequeña comunidad de Kaukira, situada a orillas de la laguna de Caratasca.
La bióloga dedicó sus esfuerzos a la conservación de los recursos naturales, a la promoción de la pesca sostenible y al bienestar de los pescadores artesanales de Honduras como gerente del Proyecto MiPesca, enfatizó Loddo, un profesional del campo forestal, natural de la isla italiana de Cerdeña, que lleva una veintena de años en Honduras.
Molina, recalcó Loddo, «ha sido miembro importante de la Empresa de Servicios Múltiples Unión de Pescadores (Kauma) y una de las personas que más ha impulsado y sido el alma y pionera en general de los sistemas de pesquería de baja escala en toda la zona norte» del país centroamericano.
El proyecto tiene su origen a partir de la necesidad de la Kauma, en cuya sede fue inaugurado.
UNA APUESTA CON LOS PEQUEÑOS PESCADORES
Kauma aglutina a pescadores artesanales que «desde hace muchos años han planteado su preocupación respecto a la urgencia de una solución que les permita abastecer el consumo eléctrico de todas las operaciones del centro de acopio, planta de procesamiento y comercialización de mariscos», indicó en un comunicado GOAL, una agencia irlandesa humanitaria y de desarrollo fundada en 1977.
De agosto a enero, luego de seis meses de duración de la veda de los recursos del mar en el Caribe de Honduras, la energía es un factor clave para la operación de la red fría y el maquilado de los productos que los pescadores procesan, de los cuales depende el sustento de sus familias.
Loddo dijo que GOAL le apuesta en Honduras a la pesca, «pero no a lo mismo de siempre, no a los grandes barcos, no a la gran industria (que está en pocas manos) que te hace los números, sino que le apuesta a la gente que día a día arriesga su vida, al pescador fatigado en las aguas de este mar hondureño agitado que por tantos años ha sido olvidado».
«Luchamos también en contra de estigmas que dicen que el pescador artesanal no puede. El pescador puede hacer mucho y puede hacer su futuro y lo puede hacer de una buena forma, creciendo con su trabajo. Se trata de darle la oportunidad. La granja solar que está aquí es una oportunidad, porque es un lugar donde no ha llegado la luz eléctrica y no va a llegar en los próximos años», subrayó.
Loddo destacó además los retos que se están presentando con el cambio climático, por lo que la generación de energía limpia «es muy importante para la sostenibilidad del mundo, del ecosistema que nos da de vivir todos los días».
Otro elemento fundamental es relacionar energía limpia y pesca, porque a través de esta energía se está generando el primer anillo de la cadena de hielo para que al pescador ya no se le arruinen el pescado y otros productos, y éstos lleguen a los supermercados buenos y con mejores precios, apostilló.
El presidente de la Junta Directiva de la Kauma, Duval Haylock, afirmó que la granja «viene a solventar muchos problemas de los pescadores, no solo del sector de Kaukira, sino de toda el área de la Mosquitia hondureña.
«Me siento orgulloso porque no hay otra empresa aquí en Gracias a Dios que tenga la electrificación que tenemos nosotros, y muy agradecido con todos los cooperantes con nos están acompañando», subrayó. EFE
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