-La tierra que sabe a cariño y huele a Coyol, Olancho, celebró este fin de semana el Tercer Festival del Coyol, una actividad que movilizó a cientos de turistas del departamento, pero también de sectores aledaños.
Ya sea con pajilla desde el propio tronco o en los frascos ya fermentados, los lugareños procedieron a degustar del líquido que para muchos es considerado un «manjar de los dioses».
Las autoridades de la zona hicieron alarde de la actividad y lanzaron la casa por la ventana, ya que dijeron sentirse orgullosos de tener entre sus costumbres y tradiciones el consumo del vino.
La actividad fue inaugurada, en nombre del Presidente por el ministro de Turismo, Emilio Silvestri y de la Secretaría de Desarrollo e Inclusión Social, Reinaldo Sánchez, así como el gobernador, Walner Castro.
Tanto Silvestri como Sánchez llamaron a promover el turismo interno y a disfrutar de cada uno de los lugares turísticos del país.
Sánchez destacó el buen estado de las carreteras e indicó que hacer turismo interno también es importante para beneficiar a los microempresarios que comercializan diferentes productos.
El vino
El vino de Coyol es extraído del árbol del mismo nombre, el cual es cortado y colocado en el suelo en forma horizontal para realizar un agujero, también llamado orquedad de donde las personas pueden degustar el líquido natural.
Ante tan peculiar tradición, los olanchanos decidieron instaurar el Festival del Coyol, donde las personas puede degustar del líquido.
Este año, la celebración tuvo lugar en Juticalpa, donde microempresarios de todo el departamento expusieron diferentes productos.