Radio América. El Centro de Atención al Migrante Retornado de San Pedro Sula (CAMR-SPS) recibió este viernes un vuelo proveniente de México con 136 personas, entre ellas 50 Niños No Acompañados (NNA), que habÃan sido retenidos por las autoridades mexicanas ya que son vulnerables a cualquier violación de sus derechos.
La llegada de estos menores se suma a la estadÃstica que registra el Centro de Atención Belén en San Pedro Sula, establecido por el Gobierno del presidente Juan Orlando Hernández para proporcionar apoyo a las familias que retornan luego de haber migrado de manera ilegal a los Estados Unidos
En ese sentido, las autoridades del centro Belén manifestaron que en las últimas tres semanas de abril ya han ingresado alrededor de 300 NNA y que la cifra de migrantes retornados a nivel nacional en lo que va del 2021 va en ascenso en comparación con el año pasado.
En lo que va del año, las estadÃsticas migratorias de la Dirección General de Protección al Hondureño Migrante indican que 1.343 NNA han llegado al paÃs, provenientes en su mayorÃa de México (1.157), Centroamérica (170) y Estados Unidos (16).
A estás alarmantes cifras se suman las aprehensiones por paÃs realizadas en la frontera sur de Estados Unidos; para el año fiscal 2021 Honduras ocupa el segundo lugar, con 11.949 detenciones de NNA, superando esta cifra Guatemala, con 18.372, informó la agencia estadounidense Customs and Border Patrol.
Luego de estar dos meses en un centro de detención de México, la compatriota Sarahà López, originaria de Atlántida, contó que le tocó ver muchos niños en el camino a Estados Unidos, porque de todos los grupos que vio en su travesÃa al norte en su mayorÃa eran menores.
«Los niños son los que más sufren en estas caravanas porque les da mucha sed y el agua es poca», relató López.
«Me tocó ver cómo a una mujer hondureña su guÃa le robó su dinero y la niña no querÃa comer lo que nos daban en la bodega donde estábamos, porque siempre es pésima, y ella no nos habÃa dicho lo que pasaba», relató López.
«Luego de que su niña lloró casi 24 horas, ella nos comentó lo que pasaba y entre todos reunimos algo de dinero para que ellas pudieran comprar algo», añadió la hondureña.